Te contamos que hijo de un juez saltó desnudo de un edificio tras matar a su madre, ahora te contamos que un dentista multimillonario de Pensilvania fue declarado culpable por asesinato y fraude postal por la muerte da tiros de su esposa en un viaje por un safari africano tras seis años de haber cometido el ilícito.
El jurado encontró que Lawrence “Larry” Rudolph, de 67 años, fue culpable de matar a tiros a su esposa de 34 años, Bianca Rudolph, luego de un juicio que duro tres semanas en un tribunal federal de Denver.
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También fue condenado por fraude postal al cobrar $4.8 millones de dólares en pagos de seguro de vida luego de la muerte de su esposa en 2016, bajo el argumento de que había sido un accidente y autoinfligida.
El jurado coincidió en que Rudolph mató a su esposa a sangre fría como parte de un plan premeditado para cobrar los pagos del seguro de vida y comenzar una nueva vida con su amante de 20 años.
Foto: Facebook
La tragedia
Los hechos ocurrieron durante un viaje de cacería en Zambia el 11 de octubre de 2016, y años después Rudolph gritó durante una cena “¡Maté a mi maldita esposa por ti!”, durante la discusión con la supuesta amante, Lori Milliron.
Durante 6 años Rudolph mantuvo su inocencia y afirmó que Bianca Rudolph se había disparado accidentalmente en el pecho mientras empacaba una escopeta. Dijo que su esposa había estado empacando sus maletas a prisa porque le urgía regresar a casa del viaje.
Los fiscales determinaron que la herida que presentaba Bianca Rudplh no podía ser autoinfligida y presentaron pruebas que el disparo en su corazón había sido disparado desde una distancia a dos o tres pies y medio.
Rudoplh habría tomado la decisión de quitarle la vida a su esposa antes de que tuviera más poder sobre las finanzas de su matrimonio y que despidiera a Miliron, gerente dental del negocio de Rudolph.
Los abogados de Rudolph argumentaron que esa no era razón lógica pues su matrimonio con Bianca había funcionado como una relación abierta desde el año 2000, lo cual les permitía tener relaciones sexuales con otras personas.
Los abogados abogaron que su cliente no tenía necesidad financiera de cobrar el seguro de vida de su esposa y que los recursos se destinaron a un fideicomiso para los hijos de la pareja.
Miliron, la supuesta amante, se enteró del asesinato después de que ocurrió. La acusaron de mentirle a un jurado federal y de ser cómplice del asesinato de Bianca y dos cargos de perjurio ante un gran jurado.
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mva