Kate Middleton, la ahora princesa de Gales, luce radiante a sus 40 años y se ha convertido en una de las figuras más queridas de la familia real por su gran estilo, su personalidad agradable y por los buenos hábitos alimenticios que lleva combinado con el ejercicio.
Al aceptar ser la esposa del príncipe William, la bella madre de la princesa Charlotte y de los príncipes George y Louis, accedió a someterse a una serie de reglas y protocolos, entre las que destaca una estricta alimentación.
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Middleton luce llena de vitalidad y con una piel radiante gracias a que consume alimentos como verduras, frutas, jugos verdes y poca carne, pero además su dieta tiene una importante restricción.
Alimentos prohibidos para Kate Middleton
La princesa de Gales mantiene una esbelta y estilizada figura, gracias a que los carbohidratos están fuera de su dieta, este hábito alimenticio lo adoptó una vez que formó parte de la realeza y especialmente a causa de la reina Isabel II.
Kate Middleton no puede comer papas (ni horneadas, ni fritas, ni hervidas) en la noche de acuerdo con Darren McGrady, un ex chef de la Casa Real: "sin papas, arroz o pasta para la cena", mencionó.
Esto debido a que a la fallecida monarca no le agradaba comer alimentos con muchos carbohidratos de noche o en la cena y prefería que en su cocina hubiesen platos ligeros, con altos porcentajes de proteínas, como por ejemplo el pescado.
Otra de las reglas impuestas por la soberana que permaneció 70 años en el trono es que a Kate Middleton y al príncipe William no se le permite consumir mejillones, ni tampoco pueden comer ostras, esto con el objetivo de reducir el riesgo de reacciones alérgicas o posibles intoxicaciones.
De vez en cuando hay que darse un gustito, por ello el mencionado chef de la familia durante 15 años, confesó que el postre preferido de Kate Middleton es el pudín de caramelo.
La reina Isabel II falleció el pasado 8 de septiembre en el castillo de Balmoral, en Escocia, aún no se sabe si el menú ha cambiado o se conservan las comidas tradicionales que adoraba la reina.