Wally, la BALLENA gris PERDIDA en el Mediterráneo por el CALENTAMIENTO GLOBAL podría ser SACRIFICADA

Wally, una ballena gris perdida en las aguas de Mallorca, España, ha estado nadando a miles de kilómetros de su migración normal, y ahora, enferma y debilitada, los expertos están considerando en sacrificarla.

Los expertos dicen que la ballena de aproximadamente dos años de edad se perdió en el Mediterráneo después de que un mundo sobrecalentado abriera rutas del norte en el Ártico.

Los biólogos están trabajando incansablemente para ayudar a reubicar a Wally por temor a que no pueda encontrar su fuente de alimento normal en las profundidades del Océano Pacífico.

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Wally fue visto en Ibiza antes de llegar a Mallorca. La coordinadora del proyecto de la Asociación Tursiops, Marga Cerdà, dice que las ballenas grises como Wally habitan en el Pacífico norte.

Se sospecha que la ballena pasó por el Paso del Noroeste hacia el Atlántico y luego hacia el Mediterráneo, donde no hay el alimento que se necesita.

Cerdà agrega que Wally tiene pocas posibilidades de sobrevivir, a menos que logre meterse en el Atlántico, donde podría tener una oportunidad.

Debate sobre el futuro de Wally

Ante la desesperada situación de Waly, los expertos están divididos. Mientras algunos creen que se debe acortar el sufrimiento de la ballena, Juan Antonio Raga, catedrático de zoología de la Universidad de Valencia, cree que la naturaleza debe seguir su curso.

De acuerdo con los expertos, la ballena de 8 toneladas se encuentra en estado crítico y fase terminal debido al cansancio, por lo que investigadores del Oceanogràfic de Valencia planean sacrificar al animal de manera indolora.

Calentamiento global causó la desorientación de Wally

El calentamiento global ha derretido el hielo de los pasillos que conectan el océano Pacífico con el Atlántico. El cetáceo debía descender por la costa del Pacífico desde Alaska hasta California. Sin embargo, viró por el Atlántico hasta la costa francesa y luego llegó al Mediterráneo.

Se cree que Wally tomó el Estrecho de Gibraltar hasta el Mediterráneo y siguió la costa marroquí antes de viajar a través de las costas italianas hasta Mallorca.

La ballena nada de 50 a 60 millas por día y se acerca rápidamente a la costa española, lo que podría significar más problemas para el joven mamífero.

Esta es la segunda vez que los biólogos observan una ballena gris en el Mediterráneo. La última vez fue en 2010.

JOS