Después del fin de semana es común caer en exceso de comida y bebida que podrían repercutir en el estómago y el hígado. No solo es el alcohol sino también algunos alimentos, los cuales podrían causar daño en este órgano.
En casos extremos se pueden originar padecimientos como el hígado graso o cirrosis. Por eso no solo es necesario dejar el alcohol.
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Hay una serie de remedios naturales y sobre todo una dieta baja en grasas para que el órgano se recupere.
Comer frutas y verduras
Una investigación del Journal of Epidemiology and Community Health, comer frutas y verduras previene enfermedades como el hígado graso pues reduce los radicales libres relacionados con daños hepáticos.
Consume cereales
Estos son avena o arroz, no los procesados, pues favorecen el metabolismo del hígado y así se reducen enfermedades. Es benéfico para personas con sobrepeso.
Tomar agua
Es una acción simple que ayuda a desintoxicar todo el cuerpo, incluido el hígado. De esta forma le ayuda a realizar sus funciones básicas y acelera su metabolismo.
Toma jugos y tés
Uno de los más benéficos es el de naranja con jengibre que servirá para limpiar el hígado. Las personas con problemas gástricos también deben moderar su consumo. El té de menta sirve para desintoxicar el hígado, sobre todo si es natural.
No hacer dietas solo porque sí
Una de las que se debe evitar es la dieta detox pues por querer bajar de peso se pueden desencadenar problemas hepáticos. Las dietas muy restrictivas ayudan a reducir los niveles de grasa pero la recomendación es que antes se consulte a un nutriólogo o especialista.
chp