La Fiscalía General de Nueva York reveló imágenes impactantes del momento en que un hombre queda envuelto en llamas, después de que un policía le dispara con una pistola eléctrica.
A pesar de que los hechos ocurrieron el pasado 30 de octubre de 2021 en una estación de policía de Catskill, es hasta ahora que la fiscalía ha decidido hacer públicos dos videos que muestran lo sucedido.
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La víctima, de nombre Jason Jones, de 29 años, murió seis semanas después del incidente.
De acuerdo con las declaraciones de los oficiales, el sujeto había entrado en el departamento de policía en aparente estado de ebriedad con la intención de enfrentar a los agentes.
En las grabaciones se puede ver a Jones quitándose la camiseta y arrojando una bota a una mesa mientras mantenía una acalorada discusión con el personal de policía. El hombre entonces tomó un desinfectante para manos y empezó a rociarlo en su cabeza.
Acto seguido, uno de los oficiales disparó su arma de electrochoques contra Jones, quien continuaba inquieto, lo que provocó que inmediatamente estallara en llamas debido a la reacción del taser con desinfectante inflamable.
Al ver la escena, los agentes retrocedieron y se encerraron en dos cuartos poco más de 20 segundos, mientras el hombre seguía intentando apagar el fuego. Al extinguirse, los agentes salieron para auxiliar al hombre, quien ya presentaba heridas de gravedad.
ADVERTENCIA: estas imágenes podrían resultar perturbadoras para el público, se recomienda discreción.
Tras pasar 48 días en cuidados intensivos, finalmente Jones falleció el pasado 15 de diciembre, sin que las autoridades dieran a conocer la causa exacta de su muerte.
La fiscal general de Nueva York, Letitia James, dio a conocer las imágenes al público el viernes “con el fin de aumentar la transparencia y fortalecer la confianza pública en estos asuntos” y anunció que ya inició una investigación para esclarecer lo sucedido.
En tanto, el abogado de la familia, Kevin Luibrand, dijo en declaraciones para la cadena CBS News, que “Jason estaba desarmado y sin amenazar a nadie cuando la policía lo golpeó con 50.000 voltios de corriente eléctrica”. Añadió que “en lugar de ayudar a Jason, la policía salió corriendo de la habitación, cerró la puerta y lo dejó arder”.
Con información de RT y CNN
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