Cuatro presos de una cárcel en Arkansas, Estados Unidos, acusan a los directivos y médicos de la penitenciaria de haber experimentado con ellos sin su consentimiento.
Los reclusos presentaron una demanda contra la administración y el personal de salud de la prisión por haber realizado una "experimentación médica" con ellos, luego de que les suministraron un supuesto medicamento para tratar el Covid-19.
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Los reos aseguran que fueron engañados por los responsables del centro de detención del condado de Washington, pues no se les informó de la naturaleza, composición o los posibles efectos secundarios de este fármaco.
En la demanda, presentada ante un tribunal federal en Arkansas por la Unión Americana de Libertades Civiles, los demandantes alegaron que los médicos les administraron dosis desconocidas del antiparasitario Ivermectina, un compuesto para uso veterinario.
A los presos se les dijo que se trataba de "vitaminas", "antibióticos" y/o "esteroides", sin embargo, al cabo de unos días, comenzaron a sufrir problemas de visión, diarrea y dolores estomacales.
Según relatan los afectados, el médico de la cárcel comenzó a administrar Ivermectina a los reclusos en noviembre de 2020, llegando a suministrar este fármaco a unos 250 presos. En tanto, los cuatro denunciantes recibieron el medicamento después de dar positivo por Covid-19 en agosto pasado.
Si bien actualmente se están realizando estudios clínicos que evalúan las tabletas de Ivermectina para la prevención o el tratamiento del Covid-19, los datos aún no muestran que sea eficaz contra el virus.
La Administración de Alimentos y Medicamentos de EE.UU. (FDA, por su siglas en inglés), había alertado con anterioridad de los peligros del “uso indebido de la Ivermectina para tratar o prevenir el Covid-19”, ya que en grandes dosis puede ocasionar daños graves como “convulsiones, coma e incluso la muerte”.
Con información de RT
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