Bien dice un dicho que “cuando te toca aunque te quites y cuando no te toca aunque te pongas” y fue precisamente esto último lo que le sucedió a un hombre en Indonesia, quien milagrosamente sobrevivió al impacto de un rayo fulminante.
El increíble suceso tuvo lugar durante una tormenta eléctrica en Yakarta, la capital y la ciudad más poblada de Indonesia, y fue captado por las cámaras de vigilancia de una zona de aduanas en la localidad de Cilincing.
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El video muestra el momento exacto en que un guardia de seguridad es alcanzado por un rayo mientras caminaba bajo la lluvia.
En segundos, se puede observar un chispazo y al hombre que parece caer al suelo fulminado, mientras sus compañeros se acercan para auxiliarlo.
A pesar de la fuerza del relámpago, sorprendentemente el oficial logró sobrevivir gracias al paraguas que llevaba con él y que lo protegió al momento del impacto, pues aparentemente este artefacto ayudó a amortiguar la energía del rayo.
Más tarde, la policía local informó que el hombre, de 35 años, fue llevado a un hospital donde fue sometido a tratamiento intensivo y, por increíble que parezca, al final el guardia de seguridad solo sufrió de algunas quemaduras en las manos y fue dado de alta solo 4 días después del incidente.
¿Cuál es la probabilidad de que te caiga un rayo?
De acuerdo con el Centro de Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos, la probabilidad de que un rayo caiga en un periodo de un año es de 1 en 500 mil, aunque existen condiciones en las que esta probabilidad aumenta.
Según datos del Centro Nacional de Prevención de Desastres (Conapred), aunque se estima que sólo el 20% de los rayos va a dar al suelo, las personas que son alcanzadas por un rayo pueden tener graves daños a la salud, como parálisis, quemaduras, dolor de cabeza intenso, pérdida de la memoria y audición, e incluso la muerte.
¿Cómo prevenir daños durante una tormenta eléctrica si estás en la calle?
- No corras ni te acueste en el piso.
- Aléjate de postes eléctricos, antenas y bardas metálicas.
- No te refugies debajo de los árboles.
- Colócate en cuclillas con los pies juntos, la cabeza entre las piernas, cierra los ojos y tápate los oídos.
Con información de RT
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