Harry y Meghan declinaron invitación del príncipe Carlos para que lo visitaran en Balmoral

El príncipe Harry y su esposa Meghan Markle rechazaron una "invitación abierta" para quedarse con el príncipe Carlos en su casa de vacaciones escocesa en las propiedades de Balmoral. El príncipe de Gales le dijo a la pareja que "siempre serían bienvenidos" en su casa antes de su viaje al Reino Unido, confirmaron fuentes del palacio.

Los informantes le dijeron al diario británico The Mirror que Carlos había pensado que si los Sussex se quedaban con él sería una "buena oportunidad para que todos hicieran un balance y se relajaran", pero la invitación fue rechazada.

La fuente también agregó que el hijo mayor de la reina Isabel II no ha "vacilado" en sus intentos de tener una relación con su hijo "a pesar de los ataques que parecen venir con mayor vigor".

La noticia de la invitación rechazada surgió después de que Charles, de 73 años, fuera fotografiado dirigiéndose solo a la iglesia en Balmoral la mañana de este domingo. Los informantes alegan que las burlas de Harry, de 37 años, y Meghan sobre la familia real siguen pareciendo "dolorosas" y está "completamente desconcertado" por su comportamiento.

El viaje de los duques de Sussex

Harry y Meghan, que actualmente residen en California, estarán en el Reino Unido esta semana para acudir a dos eventos benéficos. La pareja viajará a Manchester el lunes, donde Meghan, de 41 años, dará un discurso sobre la igualdad de género.

La pareja ha pedido a las empresas de seguridad privada que proporcionen un "anillo de acero" en Manchester para su aparición en el foro de jóvenes líderes "One Young World", en medio de una disputa sobre quién paga por su protección en suelo británico.

"Uno hubiera pensado que si existieran tales preocupaciones, el mejor lugar para estar sería al lado de la familia, pero ahí tienes", dijo la fuente del palacio sobre sus supuestas preocupaciones de seguridad.

Equipos de perros especialistas fueron vistos en el Bridgewater Hall, donde Meghan dará su discurso. Se entiende que la pareja y los organizadores del evento se encargaron de la seguridad después de que le dijeron a Harry que ya no tenía derecho a tener guardaespaldas oficiales de la policía armada financiados por los contribuyentes.

Un portavoz de la Policía del Gran Manchester confirmó que sus oficiales no estaban involucrados y agregó que la seguridad para el evento había sido "privada".

El domingo se vieron dos equipos de perros diferentes en el lugar, incluido uno de la empresa privada Global Support Services, que proporciona perros de protección, perros de detección especializados, protección cercana y otros servicios de seguridad.

También se vio a un perro de aguas siendo subido a una camioneta marcada como 'Perros de búsqueda especializados', que tenía la placa de matrícula SN13 FER. Un equipo de limpiadores también estaba en el lugar, limpiando ventanas y usando un soplador de hojas para despejar los caminos.

El viaje de la pareja se produce en medio de la batalla legal en curso de Harry con el gobierno sobre su seguridad cuando está en el Reino Unido. Empezó una acción legal después de que le dijeron que ya no recibiría el "mismo grado" de protección personal después de retirarse de la familia real en 2020.

Dijo que no se sentía seguro con los arreglos de seguridad actuales al traer a su familia aquí y se ofreció a pagarle a la policía británica para que él mismo actúe como guardaespaldas. El mes pasado, ganó una licitación para presentar una demanda ante el Tribunal Superior contra el Ministerio del Interior.

Se cree que Meghan y Harry llegaron al Reino Unido el sábado y se quedaron en Frogmore Cottage en Windsor a pesar de que los informantes afirmaron que fueron invitados a quedarse con Charles.

abc