‘Despierta América’: Famosa conductora del matutino recuerda abuso que padeció a los 7 años

Para nadie es un secreto que las conductoras del matutino de Univisión, “Despierta América”, se han sabido muy bien cómo ganar el corazón de los televidentes que continuamente las acompañan. 

Sin embargo, conforme va pasando el tiempo, cada una de ellas ha tenido la oportunidad de hablar con sus seguidores de diferentes aspectos que han sucedido a lo largo de su vida, mismas que las han llevado hasta donde están ahora. 

La más reciente de ellas es nada más y nada menos que Astrid Rivera, quien por primera vez cuenta uno de los más oscuros secretos que tiene, mismos que sufrió cuando era tan sólo una niña.

A pesar de que la puertorriqueña siempre se ha caracterizado por su carisma y alegría, por primera vez habla con la transparencia que siempre la ha caracterizado, sin olvidar su porte y fortaleza. 

Lo que sí es un hecho, es que el recuerdo ha abierto una herida dentro de la conductora que la llena de lágrimas en plena transmisión en vivo y en frente del resto de sus compañeras. 

Rivera compartió su oscuro pasado frente al resto de sus compañeros, tanto Francisca, Jomari Goyso, Lourdes Stephen, Marcela Sarmiento y Jessica Rodríguez pudieron sentir su dolor. 

El tema salió a relucir cuando durante el segmento de espectáculos cuando se dio a conocer la sentencia de 19 años en prisión para el ex integrante de Garibaldi, Ricardo Crespo por abusar sexualmente de su propia hija. 

Astrid Rivera narra su infierno de infancia 

Durante la plática la guapa conductora rompió en llanto cuando se estaba dando la nota de la sentencia del ex cantante y actor, por lo que decidieron preguntarle qué es lo que le pasaba. 

“Una de las cosas más importantes en un caso como este, si tu hija te dice una cosa como esta, le creas”, comenzó la reportera al contar. 

De inmediato, la recién casada Francisca, decidió preguntarle cuidadosamente, el por qué de su condición y de sus lágrimas, a lo que Astrid continuó con la fuerza que la caracteriza.

“Porque cuando yo tenía 7 años yo pasé por una situación similar con un tío de mi mamá, y aunque ella me creyó no pudo hacer nada, ¿por qué? Por no romper una familia. Y yo tengo 38 años, pero estuve esperando 37 años un perdón de mi mamá que sí llegó, y llegó a tiempo, pero viví 37 años de mi vida culpándome por algo que no tenía que culparme, por algo que yo no tenía que vivir“, expresó.

De inmediato, el resto de sus compañeros se fundieron alrededor de la puertorriqueña en un abrazo, ya que de alguna manera quisieron sanar el dolor de su compañera. 

 

GBR.