¿La reencarnación de Lady Di? El hábito de Meghan Markle que irritaba a la realeza británica

Han pasado casi dos años desde que Meghan Markle y el príncipe Harry decidieron poner tierra de por medio e iniciar una vida muy lejos de la familia real, lo que ha desatado muchos roces entre ellos. 

Cabe mencionar que desde que murió la princesa Diana de Gales, Harry se caracterizó por su rebeldía e imponer su voluntad, algo que incomodaba a su familia paterna. 

Y como era de esperarse, el hermano menor del duque de Cambridge no iba a permitir que la corona eligiera a la mujer con la que iba a pasar el resto de su vida, por lo que a todos sorprendió su relación con una estrella de Hollywood.

En 2016 fue cuando Meghan Markle y el príncipe Harry oficializaron su relación para dos años más tarde unirse en matrimonio, lo que sembró una verdadera rebelión a la “firma” como la pareja llama a la familia real. 

No fue sino hasta marzo de 2021 cuando estalló la verdadera bomba al revelarse la entrevista que tuvieron los diques de Sussex con una de las presentadoras más importantes de la TV, Oprah Winfrey. 

En dicha platica, el hijo y la nuera de Lady Di revelaron una serie de acontecimientos que sucedieron poco antes de  la boda de la pareja, mismas que van desde la discriminación hasta el racismo. 

Como era de esperarse, la familia real no dudó ni un segundo en reaccionar y desmentir dichas acusaciones, y aclarar que la pareja siempre sería parte de la corona y tratados como tales. 

Pero es hasta ahora, cuando se ha dado a conocer el pequeño hábito de la ex estrella de Hollywood que casualmente la une a su fallecida suegra y que tanto irritaba a la familia real británica. 

¿Amabilidad excesiva?

Aunque muchas personas admiran como la real está rodeada de ciertos privilegios que los simples mortales quisiéramos vivir, es un hecho que también deben de cumplir con una serie de protocolos de comportamiento. 

Y es que parece que la duquesa de Sussex desafiaba a la familia real con su efusividad para saludar a las personas, ya que ellos se caracterizaban por el clásico movimiento de cabeza de los ingleses. 

De acuerdo con los expertos, Meghan, usaba esta forma de saludo con el deseo de romper las barreras reales tradicionales de comportamiento formal y discreto por una más cálida y cariñosa. 

Aunque se trate de una simple coincidencia, la fallecida princesa de Gales, hacía exactamente lo mismo con cada una de las personas que conocía y a las que se acercaba. 

Miles de seguidores han dado a entender que el príncipe Harry siempre se ha parecido más a Diana de Gales, por lo que él y su esposa planean seguir con el legado de ella. 

Esto da a entender que tanto Diana como Meghan se han caracterizado por su carácter rebelde y calidez, algo que no va con los protocolos de la familia real británica. 

GBR.