Jennifer López es una gran estrella y madre, sin embargo por la gran cantidad de compromisos que conlleva ser una artista de su talla, debe de apoyarse en otros para así poder cumplir con cabalidad todas sus obligaciones y tener en equilibrio cada uno de los aspectos de su vida.
La 'Diva del Bronx' requiere de niñeras que puedan cuidar a sus mellizos Emme y Max, fruto de su relación con el cantante Marc Anthony, que pese a que ya son unos jovencitos necesitan atención y alguien que los observe y guíe por buen camino cuando su madre no puede estar con ellos por motivos de trabajo.
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No obstante, JLo tiene unas terribles exigencias que lo le facilitan el trabajo a nadie y estas terminan renunciando a las dos semanas, así lo reveló una fuente cercana a la intérprete de 'On the floor' a National Enquirer.
"Normalmente, las personas que ganan grandes sumas de dinero y tienen muchas obligaciones profesionales y sociales contratan una niñera por cada hijo, especialmente los recién nacidos. Pero Jennifer espera que una sola niñera no solo se ocupe de los dos gemelos, sino que trabaje 16 horas al día, siete días a la semana", contó.
Es por esa gran cantidad de horas de trabajo que la primera de sus empleadas renunció, así como lo hizo la segunda.
"Contrataron a una segunda niñera, que era maravillosa con los gemelos, pero no podía soportar trabajar tantas horas sin descanso", agregó.
Fue entonces cuando Jennifer López y su expareja, Marc Anthony, buscaron a la niñera número tres, quien a diferencia de sus colegas sí pudo con la excesiva carga de trabajo impuesta por la actriz de Selena.
"Yo solía dar consejos a mis amigas que tienen hijos y me miraban como si tuviera tres cabezas. Y luego, cuando los tuve, en el momento en que los tuve, me disculpé literalmente con todas mis amigas", dijo JLo en otra entrevista sobre el rol de criar a los hijos.
Pese a que la intérprete de 'Waiting for tonight' sabe lo agotador que es ser madre, carga de trabajo a sus empleadas