Andrea Meza, la representante de México, fue coronada como la nueva Miss Universo 2021 y reconocida como la “mujer más bella del mundo”. Pero, para lograr esa apariencia, tuvo una transformación previa de la que dejó algunos rastros en redes sociales.
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Actualmente, la joven de 26 años originaria de Chihuahua, puede presumir de una figura envidiable y una sonrisa hermosa. Sin embargo, parece ser que el obtener su nueva imagen le costó un gran esfuerzo físico y también algunas operaciones.
Una prueba infalible de esto es una foto que ella misma compartió en su cuenta personal de Instagram, en la que muestra cómo se veía hace más de 10 años, en 2009 para ser exactos.
El post lo publicó en 2019, cuando se unió ala tendencia del #10yearschallenge, que consistía en compartir selfies para comparar el cambio. En la primera de ellas, la modelo luce ya su característica sonrisa y su cabello largo y castaño, pero se puede notar su nariz un poco más redondeada.
La imagen irreconocible de la nueva Miss Universo
Uno de sus post más antiguos es de 2014, y en él Andrea posa en un jacuzzi con un bikini azul, llevando su cabellera suelta. Aunque desde entonces se caracterizó por tener un abdomen plano, en esa imagen todavía aparece con brackets, su nariz también más redondeada y sus pechos son muy pequeños.
Esto podría ser una prueba de que la mexicana sí tuvo al menos dos operaciones, para conseguir esa sexy silueta que muestra ahora.
Por supuesto, también la ha mantenido gracias a su dieta, que ella misma confesó que es vegana, y sus arduas sesiones de ejercicio que incluyen caminatas al aire libre, entrenamiento funcional en grupos y prácticas de box, que le ayudan a quemar calorías y marcar mejor sus músculos.
acmg