La Reina Isabel ll continúa recuperándose tras ser hospitalizada, pues desde entonces no había asistido a un evento público hasta ahora.
En octubre, la monarca ingresó al hospital por una noche debido a que tuvo que someterse a pruebas y el equipo médico le recomendó reposo.
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A pesar de esto, la reina se recupera y continúa con su vida a los 95 años, pues tuvo una reunión con el general Nicholas Carter, jefe del Estado Mayor de la Defensa, en el castillo de Windsor.
Este domingo, no asistió a los actos en el Cenotafio de Londres por el Día del Recuerdo, debido a que sus médicos le recomendaron no acudir por una lesión en su espalda.
La reunión tuvo lugar en Oak Room y optó por usar un vestido floral con varios colores como naranja, verde y blanco, así como un collar de perlas.
Isabel II aseguró estar "bastante triste" debido a que el general abandonó el cargo militar, pues ya llevaba "mucho tiempo".
Este martes tampoco acudió a la asamblea nacional de la Iglesia de Inglaterra por primera vez en sus casi 70 años de reinado.
En su lugar, asistió su hijo el príncipe Eduardo, quien leyó en un discurso: "Ninguno de nosotros puede ralentizar el paso del tiempo y, aunque a menudo nos centramos en todo lo que ha cambiado a lo largo de los años, muchas cosas permanecen sin cambios, incluido el Evangelio de Cristo y sus enseñanzas".
Por otro lado, la recuperación de su esguince en la espalada podría tardar varios meses, pero todo indica que la Reina se encuentra mejor de lo esperado.
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amv