Luego de meses de negociaciones, finalmente Elon Musk completó el acuerdo de compra para adquirir Twitter por 44 millones de dólares, así lo confirmó la compañía que a partir de este viernes será dirigida por el hombre más rico del mundo.
"El pájaro ha sido liberado", escribió el magnate en su cuenta de la red social luego de que la noticia se hiciera oficial.
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Como algunos recordarán, Musk y los directivos de Twitter estuvieron semanas en un "tira y afloja" sobre los detalles legales de la operación. Y es que el multimillonario fue quien se ofreció a comprar la empresa en un principio, pero poco después se retractó y dijo que quería retirarse del trato.
En respuesta a la indecisión del CEO de Tesla y SpaceX, Twitter inició acciones legales para obligar al empresario a completar la compra y pagar lo prometido, lo que trajo varios momentos de tensión entre ambas partes.
Ahora, sus primeras acciones como "jefe twit" han provocado todo un escándalo al interior de la compañía y muchos se preguntan qué otros cambios vendrán después con Musk liderando una de las plataformas globales más importantes del internet.
Lo primero que hizo Elon Musk y no gustó a los altos directivos
Este jueves, el mundo entero pudo ver a un eufórico Elon Musk entrando a la sede central de Twitter en San Francisco con un lavabo de porcelana.
El propio Musk publicó el video de su peculiar entrada en su cuenta oficial y lo acompañó del mensaje "Let that sink in!", que podría intepretarse como "Deja que se hunda" o "Toma nota".
Poco después, medios como The Washingon Post, The Wall Street Journal, Bloomberg y Reuters reportaron que lo primero que hizo el magnate al tomar la dirección de la red social, fue despedir a varios de los altos ejecutivos de Twitter.
Entre los destituidos figuran el director general de la plataforma, Parag Agrawal; el jefe financiero, Ned Segal, y Vijaya Gadde, encargada de asuntos legales, así como Sean Edgett, asesor jurídico general; quienes básicamente fueron quienes acudieron a los tribunales para obligar a Musk a cumplir con el acuerdo de compra.
Luego de esta información saliera a la luz, el jefe de Tesla dijo que Twitter necesitaba cambios significativos y, además, aclaró que su interés en la plataforma no es para ganar dinero.
De igual modo, comenzaron a surgir rumores que entre los planes del millonario estaba el recortar un 75% de la plantilla de trabajadores de la red social. Sin embargo, durante su visita a la sede de Twitter de este miércoles, el empresario habría prometido no hacerlo, según Bloomberg.
Por otra parte, una fuente de esta misma agencia indicó que el magnate asumirá el cargo de director ejecutivo de forma temporal, por lo que podría ceder el puesto más adelante. No obstante, los representantes de la plataforma se negaron a hacer comentarios sobre este asunto.
¿Qué le depara a Twitter?
Musk, quien se ha autoproclamado como un "absolutista de la libertad de expresión", ha criticado las políticas de moderación de Twitter desde hace varios años. En especial, desde que algunas voces conservadoras y de derecha aseguran que están siendo censuradas de la plataforma, una acusación que Twitter niega.
Uno de los vetados de la red social es precisamente el ex presidente de Estados Unidos, Donald Trump. Sobre su caso, Musk dijo que negarle el acceso a Twitter al ex mandatario "era tonto" y que lo revertiría una vez que tomara control de la empresa.
Por otro lado, hay quienes temen que relajar las políticas de moderación, pueda incentivar los discursos de odio en la plataforma, aunque el millonario parece más preocupado por revisar las cuentas de spam.
El empresario también ha publicado que entre sus planes para Twitter está "X, la app para todo", algo así como una especie de superaplicación que podría incorporar diferentes servicios que incluyen mensajería, red social, pagos y pedidos de comida.
bnaj