Para nadie es un secreto que las cosas en cuanto a la pandemia por COVID-19 y su nueva variante, Ómicron, parece que se ha salido de control con la gran cantidad de casos contagiados.
Y es que justo a la mitad del primer mes de 2022, ya se ha reportado un incremento que ha sobrepasado los pronósticos que tenían los especialistas y expertos en la materia.
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Sin embargo, para tranquilidad de muchas personas, aunque los contagios van cada vez más en aumento, las muertes cada vez son menos gracias a las vacunas y dosis que ya tiene cada persona.
Por ende, muchos especialistas han llegado a la conclusión que apunta a que las vacunas siguen siendo la única opción para terminar de una vez por todas con el virus de origen chino.
Pero lo que ha comenzado a alarmar a la autoridades fronterizas, es la cantidad de casos positivos que ya han sido confirmados de la manos de los migrantes que se encuentran detenidos en la frontera norte de México.
Casos dentro los detenidos en el ICE
De acuerdo con las últimas cifras que han sido reveladas por las autoridades fronterizas, los casos han aumentado en un aumentaron 670 % desde principios de 2022, lo que provocó nuevos llamados de organizaciones para liberar a los detenidos.
Y es que los datos han sido actualizados por el Servicio de Control de Inmigración y de Aduanas (ICE), y hasta el pasado viernes 14 de enero, mil 902 inmigrantes detenidos están contagiados actualmente de COVID-19, un aumento respecto a los 285 casos activos del pasado 3 de enero.
Dentro de los detenidos lidiando con el contagio representan el 8,5 % de los 22.145 inmigrantes que el ICE tiene actualmente en su red de 200 centros de detención, cárceles de condado y prisiones privadas.
Y es que hasta el momento se han realizado poco más de 500 mil pruebas de COVID-19 en el ICE a los detenidos, pero la agencia no ha revelado cuántos de los guardias de estas cárceles han dado positivo.
Para ejemplificar un poco la situación por la que se encuentran atravesando, se sabe que el Centro Residencial del Condado de Karnes, en Texas, registra actualmente el mayor número de personas aisladas por el virus con 253.
Mientras que en el Centro Correccional de La Palma en Arizona ya tienen 175 contagiados, siendo este último centro el que ha estado bajo el escrutinio público por las pobres condiciones sanitarias.
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