El primer ministro israelí Benjamin Netanyahu continuará los ataques contra Hamas "hasta conseguir el objetivo", a pesar del pedido del presidente estadounidense Joe Biden de desescalar las hostilidades en Gaza.
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En un comunicado, el primer ministro israelí indicó que “aprecia mucho el apoyo del presidente estadounidense”, pero que su gobierno seguirá adelante “para devolver la calma y la seguridad a ustedes, ciudadanos de Israel”.
Biden había pedido una “desescalada significativa” para el fin de la jornada luego de 10 días de combates intensos entre Israel y Hamas en Gaza, de acuerdo con la agencia AP.
El gobierno de Joe Biden ha instado en privado a Israel a reducir sus bombardeos sobre Gaza, según funcionarios estadounidenses citados por AP.
Negociadores egipcios también trabajaban para detener las hostilidades, y si bien no habían hecho progresos con Israel, eran optimistas sobre que la presión internacional obligaría al país a sentarse en la mesa de negociaciones, aunque no estaba claro si los esfuerzos tendían éxito.
El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, dijo que Israel espera restaurar la tranquilidad “deprisa”, aunque no descartó una nueva escalada.
Aumentan víctimas mortales
Al menos 219 palestinos han muerto en ataques aéreos, incluidos 63 niños y 36 mujeres, con mil 530 personas heridas, según el Ministerio de Salud de Gaza, que no separa las cifras de civiles y combatientes. Hamas y el grupo Yihad Islámica dicen que al menos 20 de sus combatientes han muerto, mientras que Israel dice que la cifra es de al menos 130.
Este miércoles, al menos seis personas murieron en ataques israelíes en Gaza, que destruyeron una gran vivienda familiar. Mientras que en Israel han muerto por ahora 12 personas por ataques de cohetes, incluido un niño de 5 años.
El Ejército israelí ha lanzado cientos de ataques aéreos que dice van dirigidos contra la infraestructura armada de Hamas, mientras que milicianos palestinos han enviado más de 3 mil 700 cohetes a Israel, de los que unos 550 se quedaron cortos.
Los combates comenzaron el 10 de mayo, cuando Hamas lanzó cohetes de largo alcance hacia Jerusalén en apoyo de las protestas palestinas contra las agresivas intervenciones policiales en el complejo de la Mezquita de Al Aqsa, un disputado lugar de culto venerado por judíos y musulmanes, y por la amenaza de desahucio sobre docenas de familias palestinas a instancias de colonos judíos.
CRS